Existen muchas personas que practican la guitarrra, pero hay una diferencia enorme entre aprender a "tocar" y aprender a "como" tocar. la guitarra para quien unicamente la sabe ejecutar es solo una caja de madera con hilos de nylon o de acero, imagina lo feo que se oye; Mientras que quien además de tocarla sabe como hacerlo tendra a sus pies muchas posibilidades. Cuando empezaba con el maravillosos mundo de este instrumento conoci un amigo que me enseñaba, tocaba perfecto, nítido, metricamente afinado, era absoluto, certero y diestro en la ejecucion, yo lo envidiaba (seguro conoceran a alguien asi) sacaba todas las canciones de moda y se oían tal cual, pero tenia algo que para mí era entonces un pequeño problema: solo tocaba intros o solos, cuando yo o alguien le pedia que cantara apenas musitaba unas frases, siempre con la cabeza gacha, habia practicamente que rogarle para que tocara alguna canción, sin embargo no le di importancia a esto porque pensaba que de todas maneras sabia tocar, pero lo peor es que yo queria ser como él, claro mira se sabe el comienzo de "tears in heaven" de "a puro dolor" de "vivir sin aire" me decía a mí mismo.

Una noche pase por la casa de un amigo que me convidó a pasar para que oyera a su cuñado tocar, este personaje era un muchacho que cuando entré estaba apenas afinando la guitarra pero no tardó mucho, empezo a sonreir y le pidio a su novia que le solicitara alguna canción, me pareció algo tan mágico que empece a abir los ojos, ella le pidio un vallenato de "Diomedez Diaz" que lo dice todo "Bonita" muy conocido aqui en Colombia, él con un ritmo muy básico y tres o cuatro acordes le impregnó de sentimiento la casa a mi amigo, y ese vapor de ebullición cósmica de notas sobrepasó los limites terrenales y se convirtio casi en canto celestial, él le cantaba a su novia pero el sentimiento lo desbordaba, su voz era potente y afinada y no más; Al terminar la canción el encanto seguía en el ambiente porque los vecinos desde sus ventanas aplaudieron, tal vez pensando que era una serenata. Le pedí que tocara "LA GOTA FRIA" solo para saber si su guitarra estaba hecha de un material común y si esa sensacion solo se debió al momento, y la tocó con tal entusiasmo y significado que en verdad parecía que Moralito aparecería a desafiarlo o Emiliano Zuleta a acompañarlo.

Me dí cuenta de mucho: -lo lejos que estaba mi amigo que tocaba de lograr el fin verdadero de la guitarra,-lo poco que sabía yo de como tocar una guitarra y sobretodo algo que hay que tener presente: lo poco que habia aprendido despues de haber aprendido tanto, lo mucho que vale una guitarra en una noche de amor.